Despertá con una piel radiante: cuidados matutinos para empezar el día
Hay muchas teorías asociadas al cuidado de la piel. Sin embargo, muchos especialistas coinciden en que los cuidados matutinos verdaderamente pueden marcar la diferencia para tener una piel radiante. En ese sentido, hay algunos consejos a tener en cuenta y los desarrollamos a continuación. ¡Vamos por eso!
Es normal que, a la mañana, nos levantemos con el tiempo justo para comenzar con nuestras actividades. Asimismo, que tengamos la atención puesta en todo lo que tenemos que hacer. Sin embargo, una buena idea es cambiar el foco y comenzar la jornada con una rutina de autocuidado. Lo mejor de todo es que esto no solo te traerá beneficios a la piel, sino a toda tu calidad de vida.
Descubrí también: Granitos por estrés ¿Cómo manejarlos y prevenir su aparición?
Limpieza de la piel: el primer paso hacia una piel radiante
La limpieza adecuada de la piel es esencial para eliminar las impurezas acumuladas durante la noche y prepararla para recibir los productos de cuidado posterior. Recordemos que, al dormir, el cuerpo está en reposo y el trabajo metabólico se realiza para restaurar todos los órganos y tejidos. Entonces, es fundamental retirar todo ese material residual cuanto antes.
Utilizá un limpiador facial suave y adecuado para tu tipo de piel. Masajeá suavemente el limpiador en tu rostro con movimientos circulares y luego enjuagá con agua tibia. Evitá usar agua caliente, ya que puede resecar la piel. Es muy importante que el producto limpiador se retire ya que este no ha sido formulado para quedarse allí. A excepción de productos puntuales como Bonaven, que reemplaza el uso del agua y puede ser una opción práctica para limpiar la piel en cualquier momento.
En los cuidados matutinos también entra la hidratación profunda
La hidratación es crucial para mantener una piel radiante y saludable. Después de tonificar, aplicá una crema hidratante ligera o una loción facial que se adapte a tu tipo de piel. Masajeá suavemente la crema en tu rostro y cuello en movimientos ascendentes para estimular la circulación sanguínea y promover un aspecto fresco y radiante, hasta que se absorba por completo.
En este punto es muy importante que pongas atención a la hora de elegir la crema o sérum hidratante. Esto, porque si no lo haces, tu piel podría reaccionar con un brote alérgico, resecándose o bien produciendo más sebo de lo habitual. ¿Cómo hacerlo? Poniendo el foco en los principios activos de cada fórmula y en su consistencia: cosméticos más livianos para las pieles grasas y los más pesados para las pieles secas.
Protección solar: el escudo contra los daños del sol que no podes olvidar
No importa la época del año o las condiciones climáticas, aplicar protector solar es fundamental para proteger la piel de los dañinos rayos UV. Tampoco importa si estás dentro de casa y no tienes planeado salir. Este es un cosmético que hay que usar cada día, sin excusas. ¿Cuáles son sus beneficios? La prevención contra la aparición de manchas y las líneas de expresión prematuras.
Elegí un protector solar con un factor de protección solar (FPS) adecuado para tu tipo de piel y aplícalo generosamente en todas las áreas expuestas. No te olvides de áreas como las orejas, el cuello y el dorso de las manos. Reaplicá el protector solar cada dos horas si estás expuesto al sol durante todo el día o si tienes contacto con el agua.
Cuidado de los ojos: revitalizá tu mirada
La delicada piel alrededor de los ojos requiere cuidados especiales. Aquí hay menos cantidad de células adiposas, con lo cual, la zona es mucho más sensible y fina. Esa es la razón por la que aparecen las primeras líneas de expresión aquí y no en otras partes del rostro.
Aplicá una crema para los ojos formulada específicamente para tratar problemas como ojeras, bolsas y líneas de expresión. Colocá suavemente la crema con el dedo anular alrededor del área de los ojos hasta que se absorba por completo. Esto ayudará a hidratar y suavizar la piel, y a reducir los signos de fatiga.
Hábitos complementarios a los cuidados matutinos
Hasta aquí hemos detallado los pasos que deberías cumplir cada mañana para preservar la salud de tu piel. Sin embargo, eso no es suficiente. Existen otras buenas prácticas complementarias que puedes incorporar a tu día a día en las mañanas o en las noches, pero con cierta periodicidad. Lo desarrollamos a continuación.
Exfoliación semanal para una piel radiante
Además de los cuidados matutinos diarios, es importante exfoliar tu piel al menos una vez a la semana. La exfoliación ayuda a eliminar las células muertas de la piel y estimula la renovación celular, revelando una piel más radiante y suave. Es la única manera de colaborar con tu organismo para que elimine aquellas capas de la piel que dan el aspecto de envejecimiento.
Utilizá un exfoliante suave y aplícalo con movimientos circulares suaves. Enjuagá con agua tibia y asegurate de aplicar una crema hidratante después de la exfoliación para nutrir la piel. Por supuesto, el exfoliante también debe ser elegido en función de las características de tu piel.
Hidratación interna: debes beber agua para tener una piel radiante
Además de los cuidados externos, no debemos olvidar la importancia de hidratarnos adecuadamente desde el interior. Beber suficiente agua durante el día ayuda a mantener la piel hidratada, mejora la circulación y promueve una tez radiante. Intentá beber al menos ocho vasos de agua al día y complementá tu dieta con alimentos ricos en antioxidantes, como frutas y verduras, para nutrir tu piel desde adentro.
En la almohada también hay soluciones para una piel radiante
Por supuesto, los cuidados matutinos de la piel no deben ser tan rigurosos si gozas de un buen descanso. Este es un tema especialmente sensible para algunas personas y más resuelto para otros. Si tu caso es el primero, quizás este consejo te ayude: cambia la almohada y también la funda.
Podría interesarte: ¿Cuáles son las vitaminas más importantes para la piel?
La forma de la almohada puede ser el causante de tu mal dormir. Asimismo, la textura de la funda puede ser el causante de muchas afecciones de la piel. Es por eso que se recomienda el uso de fundas de satén ya que son más suaves. Si las usas, al amanecer no tendrás que lidiar con las marcas.
Conclusiones
Los cuidados matutinos de la piel son fundamentales para mantener una tez radiante y saludable. Establecer una rutina de cuidado adecuada que incluya limpieza, tonificación, hidratación, protección solar, cuidado de los ojos, exfoliación y una hidratación adecuada desde el interior te ayudará a empezar el día con una piel resplandeciente.
Aquí culmina el artículo sobre “Despertá con una piel radiante: cuidados matutinos para empezar el día”. Recordá que en Tienda de la Piel contamos con una amplia gama de productos para el cuidado de tu piel y, si necesitás asesoramiento, siempre podés contactarnos. ¡También podés dejarnos tu opinión sobre este tema en comentarios!