Enfermedades alérgicas de la piel en verano
Los días cálidos invitan a tomar sol, darse un refrescante chapuzón en la piscina o pasar tiempo al aire libre en contacto con la naturaleza. Pero cuidado: si tenés la piel sensible o padecés algún tipo de alergia, el verano puede convertirse en tu peor pesadilla. Aprendé acerca de las enfermedades alérgicas de la piel en verano y cómo prevenirlas.
Alergias de la piel más comunes en verano
Los problemas de la piel en verano son muy habituales, especialmente en los más pequeños. Las personas de piel sensible saben que deben cuidarse, pero hay algunas reacciones alérgicas que solamente se ven en verano.
Las más habituales son:
- Dermatitis atópica o eczema: se produce como consecuencia de la irritación y sudoración de la piel expuesta al sol. También por contacto con el cloro de las piscinas. En este caso la reacción incluye picazón, irritación y protuberancias.
- Urticarias: la causada por el calor, transpiración y ejercicio se llama urticaria colinérgica. Otro tipo es la urticaria solar. Se manifiesta en protuberancias rojas con el centro blanco, elevadas, con sensación de picazón.
- Reacciones por plantas: algunas plantas contienen sustancias resinosas que pueden causar reacciones alérgicas. Producen erupciones, picazón severa y ampollas. La reacción aparece entre 12 y 48 horas después de la exposición, haciendo más difícil la identificación de la culpable.
- Reacciones fotoalérgicas: si estás tomando ciertos medicamentos, la exposición al sol puede provocar una reacción alérgica. Por ejemplo: antibióticos, analgésicos, diuréticos, medicamentos para el acné o estatinas.
- Picaduras de insectos: otro problema típico del verano. Afecta especialmente a niños. La reacción puede ser desde leve o localizada, hasta grave o muy grave si la persona afectada es alérgica a la sustancia tóxica liberada por el insecto.
- Alergia al polen: las alergias nasales en verano pueden causar brotes en la piel.
Es importante diferenciar la reacción alérgica de otro tipo de reacciones cutáneas. No son alergias, pero combinadas con una reacción alérgica pueden arruinar el mejor día de verano. Prevenirlas te ayudará a mitigar los efectos de las enfermedades alérgicas de la piel:
- Sequedad e irritación: provocadas por la exposición al sol, cloro de las piscinas o aire acondicionado.
- Foliculitis: infección de los folículos pilosos a causa de la transpiración, exposición al cloro y bañeras de hidromasaje.
- Melasma: manchas cutáneas provocadas por la exposición al sol.
- Sarpullido: una reacción al calor, muy habitual en niños pequeños, es causada por la transpiración acumulada bajo la piel. También por exposición a plantas.
¿Cómo prevenir las enfermedades alérgicas de la piel en verano?
Tomá en cuenta estos consejos:
- Vestir ropa liviana, de fibras naturales y colores claros: te ayudarán a facilitar la evaporación del sudor manteniéndote fresca.
- Beber abundante agua: evitá la deshidratación y la sequedad de la piel.
- Minimizar la exposición al sol: no te expongas al sol entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde. Utilizá gafas solares, sombrero y una prenda que cubra los hombros y el pecho. Aplicá protector solar.
- Protegerse del contacto con plantas o insectos: si se impone la caminata o actividad en contacto con la Naturaleza, llevar prendas que cubran piernas y brazos y calzado adecuado.
- Ducharse después de la piscina: para eliminar los restos de cloro de la piel.
- Medicamentos: si estás tomando medicamentos que pueden provocar una reacción alérgica, consultá con tu doctor para hacer un plan de contingencia.
¿Qué hacer si se produce una reacción alérgica en la piel?
Si notás en tu piel los síntomas que mencionamos, hay algunas estrategias para aliviarlos mientras solicitas la consulta médica.
Si sabés que sos alérgica o hay personas alérgicas en la familia, es importante contar en el botiquín de emergencia con un medicamento apropiado como antihistamínicos o corticosteroides. ¡Hablá con tu médico!
Si la reacción fue causada por una planta o picadura de insecto, lavar la zona afectada con abundante agua tibia durante 20 minutos, aplicar compresas húmedas y una loción para mitigar la picazón que contenga calamina o avena, como Bonaven Loción a base de avena coloidal.
Si aparecen dermatitis atópica o urticarias, dejar que la piel respire y aplicar compresas frías.
Te recomendamos observar atentamente la reacción. En la mayoría de los casos, desaparece en pocos días o semanas. Pero si la erupción continúa o los síntomas empeoran, es imprescindible la consulta médica.
Es que las enfermedades alérgicas de la piel en verano pueden convertirse en enfermedades crónicas.
¿Te resultaron útiles nuestros consejos? ¡Contanos tu experiencia!